Intervención de nuestro portavoz en la charla debate de Viva Coín
02/02/2024
Después de saber que a este encuentro no iban a acudir miembros ni de la plataforma Desarrollo Sostenible ni del Partido Popular, estaba claro que el planteamiento tenía que ser distinto, porque ya no iba a ser un debate con distintos puntos de vista. Con este nuevo escenario, voy a intentar añadir una visión un poco diferente, para que nuestras intervenciones no sean repetición de las mismas ideas.
Tengo dos cuestiones. La primera es un aspecto privado, pero creo que no hay mejor ocasión de compartirlo que esta.
Yo no tuve la fortuna de nacer aquí, pero mi mujer y yo sí tuvimos la libertad de elegir donde queríamos construir un proyecto de vida, y lo hicimos aquí en Coín hace casi veinticinco años.
La primera vez que conocí el Nacimiento y Matagallar fue hace cuarenta y cinco años en unas campamentos de verano que por lo menos se hicieron dos o tres años seguidos en los pinos; de esto sólo se acordarán los que más o menos tienen mi edad. Imaginaos lo que significaba para un niño de un barrio de la Carretera de Cádiz este contacto con la Naturaleza. Nos bañamos en el Nacimiento, hacíamos excursiones a Barranco Blanco o bajábamos al pueblo a la piscina Monte Hoyos.
Luego vine por mi cuenta bastantes veces, porque era un espacio natural cercano en autobús, y siempre me llamaba la atención lo singular del paraje de Matagallar. Cuando terminamos viviendo aquí, mi familia y yo hemos podido disfrutar, como todas las coínas y coínos de este espacio, que ahora estamos a pique de perder.
Digo todo esto, porque quienes han conocido Matagallar desde siempre, quizá no son realmente conscientes del tesoro que alberga este municipio y hacedme caso que esto es así. Los que sí que son conscientes de ello son los inversores que vienen a explotarlo.
La segunda cuestión no es tan romántica, al revés es muy dramática. Durante estos meses me llamó la atención el concepto de acuífero que muchas personas teníamos, como si fuera una especie de lago subterráneo. Hace pocos meses, gracias a Viva Coín se explicó como funciona de verdad el acuífero. Es una especie de esponja que absorbe el agua cuando llueve y luego la bombea por presión natural. Si lo vemos a lo largo de un periodo de muchos años se comporta de forma parecida a un corazón que se llena cuando recibe agua y luego la devuelve poco a poco como si fuese un latido, un corazón que está justo debajo de Matagallar.
La primera señal de que ese corazón estaba funcionando mal la tuvimos cuando dejó de salir agua del Nacimiento. Hoy en día ese corazón se está apagando poco a poco, en parte porque ya no llueve como antes, y eso no hay persona sensata que lo niegue, pero también por el sobreesfuerzo que se le ha exigido. Precisamente ahora que somos conscientes del problema, resulta que hay alguien que quiere subirse encima de ese corazón y exigirle aún más. Creo que todos los que estamos aquí somos conscientes que eso tiene muchas posibilidades de terminar mal.
Pero la última palabra no está encima de este escenario, sino enfrente nuestra. A nuestro entender, la clave de todo esto pasa por decirle al Sr Moreno Bonilla que los ciudadanos no quieren esto. No lo decimos nosotros, lo dice varias veces la Ley LISTA que él mismo aprobó. Artículo 4. Principios generales de la ordenación y de la actividad territorial y urbanística. Punto 2a Viabilidad social: todas las actuaciones deberán justificar que la ordenación propuesta está basada en el interés general y dimensionada en función de la demanda racionalmente previsible, cumpliendo con la función social del suelo.
Laureano García Henderson, Concejal y portavoz de Unidas Podemos Coín
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Después de saber que a este encuentro no iban a acudir miembros ni de la plataforma Desarrollo Sostenible ni del Partido Popular, estaba claro que el planteamiento tenía que ser distinto, porque ya no iba a ser un debate con distintos puntos de vista. Con este nuevo escenario, voy a intentar añadir una visión un poco diferente, para que nuestras intervenciones no sean repetición de las mismas ideas.
Tengo dos cuestiones. La primera es un aspecto privado, pero creo que no hay mejor ocasión de compartirlo que esta.
Yo no tuve la fortuna de nacer aquí, pero mi mujer y yo sí tuvimos la libertad de elegir donde queríamos construir un proyecto de vida, y lo hicimos aquí en Coín hace casi veinticinco años.
La primera vez que conocí el Nacimiento y Matagallar fue hace cuarenta y cinco años en unas campamentos de verano que por lo menos se hicieron dos o tres años seguidos en los pinos; de esto sólo se acordarán los que más o menos tienen mi edad. Imaginaos lo que significaba para un niño de un barrio de la Carretera de Cádiz este contacto con la Naturaleza. Nos bañamos en el Nacimiento, hacíamos excursiones a Barranco Blanco o bajábamos al pueblo a la piscina Monte Hoyos.
Luego vine por mi cuenta bastantes veces, porque era un espacio natural cercano en autobús, y siempre me llamaba la atención lo singular del paraje de Matagallar. Cuando terminamos viviendo aquí, mi familia y yo hemos podido disfrutar, como todas las coínas y coínos de este espacio, que ahora estamos a pique de perder.
Digo todo esto, porque quienes han conocido Matagallar desde siempre, quizá no son realmente conscientes del tesoro que alberga este municipio y hacedme caso que esto es así. Los que sí que son conscientes de ello son los inversores que vienen a explotarlo.
La segunda cuestión no es tan romántica, al revés es muy dramática. Durante estos meses me llamó la atención el concepto de acuífero que muchas personas teníamos, como si fuera una especie de lago subterráneo. Hace pocos meses, gracias a Viva Coín se explicó como funciona de verdad el acuífero. Es una especie de esponja que absorbe el agua cuando llueve y luego la bombea por presión natural. Si lo vemos a lo largo de un periodo de muchos años se comporta de forma parecida a un corazón que se llena cuando recibe agua y luego la devuelve poco a poco como si fuese un latido, un corazón que está justo debajo de Matagallar.
La primera señal de que ese corazón estaba funcionando mal la tuvimos cuando dejó de salir agua del Nacimiento. Hoy en día ese corazón se está apagando poco a poco, en parte porque ya no llueve como antes, y eso no hay persona sensata que lo niegue, pero también por el sobreesfuerzo que se le ha exigido. Precisamente ahora que somos conscientes del problema, resulta que hay alguien que quiere subirse encima de ese corazón y exigirle aún más. Creo que todos los que estamos aquí somos conscientes que eso tiene muchas posibilidades de terminar mal.
Pero la última palabra no está encima de este escenario, sino enfrente nuestra. A nuestro entender, la clave de todo esto pasa por decirle al Sr Moreno Bonilla que los ciudadanos no quieren esto. No lo decimos nosotros, lo dice varias veces la Ley LISTA que él mismo aprobó. Artículo 4. Principios generales de la ordenación y de la actividad territorial y urbanística. Punto 2a Viabilidad social: todas las actuaciones deberán justificar que la ordenación propuesta está basada en el interés general y dimensionada en función de la demanda racionalmente previsible, cumpliendo con la función social del suelo.
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